El año que termina empezó con una turbulencia política casi sin precedentes en nuestra historia. El enfrentamiento del fujimorismo con el gobierno había ido escalando a lo largo del 2017, llegando incluso al intento de vacancia presidencial en diciembre de ese año. PPK se salvó de caer gracias al indulto otorgado a Alberto Fujimori, pero solo temporalmente. La confrontación política sin cuartel desatada en el verano del 2018 terminó efectivamente con el gobierno de PPK. Martín Vizcarra asumió la presidencia en condiciones políticas bastante adversas y, contra todo pronóstico, en su discurso de 28 de julio nos demostró que había asumido el mando para ejercerlo. Partiendo de una posición muy débil, el Ing. Vizcarra encontró la forma de hacerse fuerte rápidamente: anunciando una lucha frontal contra la corrupción –capitalizando el trabajo del periodismo de investigación, y de algunos fiscales y jueces aparentemente probos– y “pechando” repetidamente al congreso de la repú...
Carlos E. Paredes PhD // Gestión