Hace pocos días cayó el primer gabinete del gobierno de PPK al solicitar la confianza del Congreso y no obtenerla. Sin duda, este hecho marca un hito en el tortuoso y desgastante camino de confrontación entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo en el que absurdamente nos embarcamos hace poco más de un año. La pregunta es si este hecho, más que un hito en un camino con pendiente negativa, marcará un punto de inflexión a partir del cual podamos recobrar un camino ascendente. Tanto los optimistas cuanto los - por naturaleza - confrontacionales piensan que sí, pues el Fujimorismo no se atrevería a censurar a un segundo gabinete ya que esto abriría las puertas para el cierre del Congreso. Este argumento no me convence, pues parte del supuesto de que las partes en conflicto actúan de manera racional, en base a cálculos políticos fríos. Sin embargo, lo que hemos visto en el último año es que ha predominado un enfrentamiento cargado por una alta carga emocional, en donde el raciocini...
Carlos E. Paredes PhD // Gestión