Ir al contenido principal

Los primeros 100 días

 

                                          Fuente: Diario Gestión

A puertas de la segunda vuelta, los invito a dar un vistazo a mi bola de cristal sobre lo que pasaría en la economía durante los primeros 100 días de un eventual gobierno de cada uno de los candidatos:

Pedro Castillo

1.    Tras su elección, el tipo de cambio sobrepasó los 4.40 soles por dólar, el BCR perdió más de US$ 12,000 millones por tratar de frenar su incremento y las tasas de interés se elevaron. La abrupta depreciación del sol y el incremento del salario mínimo dictado por el gobierno contribuyeron a que la inflación superase el 1.5% en agosto y el 1.2% en setiembre. La BVL registró su mayor caída de la última década; los precios de las acciones mineras están a precio de gallina flaca, pero la demanda por ellas es casi inexistente.

2.    El gobierno aprobó un nuevo bono para los peruanos de bajos ingresos y decretó un aumento de 60% en el salario de los profesores y los trabajadores de la salud. El 30 de agosto, el Ejecutivo envió al Congreso un proyecto de presupuesto que eleva el gasto en 15% respecto al 2021. El proyecto prevé un incremento en la tasa del impuesto a la renta al 40% (para las utilidades e ingresos personales por encima de las 100 UIT) y un impuesto a las sobreganancias mineras. A pesar de los incrementos previstos en la recaudación, el déficit fiscal superará el 6% del PBI en el 2022.

3.    Tras recorrer el Perú recalcando su compromiso con los pobres, el presidente anuncia nuevas medidas populistas, polariza aún más el país, y logra convocar a una Asamblea Constituyente. La elección será a fin de año y todos dan por hecho que la izquierda obtendrá una representación mayoritaria en la Asamblea. Luego de la alarmante pérdida de reservas, el colapso de la BVL, el incremento del riesgo país y la paralización de la inversión privada, Castillo busca distanciarse del ala radical, pero generar confianza en el empresariado y en los proveedores de capital resulta un objetivo escurridizo.

Keiko Fujimori

4.    El día antes de su juramentación, el tipo de cambio cayó por debajo de los 3.40 soles por dólar y la BVL ya había recuperado las pérdidas registradas durante las dos semanas previas a la elección, el riesgo país se mantiene estable, pero la conflictividad social se incrementa, azuzada por grupos radicales. El ala radical del SUTEP promovió una huelga general indefinida y el Ejecutivo no logró que el Congreso le delegase las facultades legislativas solicitadas.

5.    El gobierno se ha focalizado en medidas con impacto en el corto plazo: aumento de Pensión 65, bonos para los más pobres, pequeñas obras de infraestructura social y énfasis en la campaña de vacunación, que avanza con el apoyo del sector privado. El Ejecutivo envió al Congreso un proyecto de presupuesto que prevé un aumento del gasto en 4%, pues considera que los ingresos fiscales no se incrementarán tanto como se tenía previsto. A pesar de su moderación, se espera que el déficit supere el 4% del PBI y que el ratio deuda/PBI sobrepase el 40%.

6.    El Ejecutivo busca activamente establecer un diálogo constructivo con el Legislativo, pero parece que Fuerza Popular está sufriendo su karma. Se anuncia la redistribución del canon, la mejora de los servicios públicos de salud, educación y seguridad ciudadana –y grandes proyectos para el futuro–; pero todos saben que para pasar del dicho al hecho hay un largo trecho de diálogo y concertación.

Y ante este panorama, Zavalita Jr. se pregunta: “¿en qué momento se jodió el Perú?” Tras pensar un rato y fumarse un cigarrillo –que ya no está de moda como cuando su abuelo Santiago trabajaba en La Crónica– concluye “hace mucho tiempo, mucho antes de elegir a este gobierno…”

Comentarios

Entradas populares de este blog

"Petroperú: crónica de un desastre esperado"

  Fuente: Diario Gestión A mediados de mayo, el ahora renunciante directorio de Petroperú emitió un comunicado en el que dio cuenta de la situación crítica en que había encontrado a la empresa. En él se delinearon las tres opciones existentes frente a la crisis de la empresa. Tras calificar de irresponsable e inmoral solicitar mayor financiamiento del Estado para hacer más de lo mismo (la primera de las tres opciones), solo restaban dos alternativas razonables. La primera era llevar la empresa a su liquidación ordenada; la segunda, fortalecer financieramente a la empresa a la vez que se cambiaba de manera radical su gobernanza y gestión. Para esto resultaba indispensable traer prácticas privadas de gestión empresarial a Petroperú. El directorio presidido por el Sr. Stark recomendó la última de estas opciones y trabajó para que esta se pudiese materializar, pero no encontró eco en el gobierno. Este último parece inclinarse por la opción de “más de los mismo” y, peor aún, con “más de...

"Petroperú: una verdad incómoda"

  Fuente: Diario Gestión Petroperú está a la deriva hace mucho tiempo. Lo sucedido el año pasado es un capítulo más en el costoso declive institucional de la empresa estatal. En febrero, el ministro de energía y minas (Oscar Vera, entonces funcionario con licencia de Petroperú muy cercano a su dirigencia sindical) y el presidente del directorio fueron removidos. En marzo, el gobierno nombró a un nuevo directorio. A los pocos meses, ante la crítica situación de la empresa, el directorio Stark planteó al gobierno cambiar la gobernanza y gestión de Petroperú con la participación y apoyo de una empresa reestructuradora de talla internacional, además de fortalecerla financieramente con nuevos aportes de capital. El directorio Stark se vio forzado a renunciar y, con una empresa descabezada, el gobierno publicó un D.U. para realizar nuevos aportes de capital y préstamos por un monto total cercano a los S/ 10,000 millones. A pesar de que la norma hacía referencia explícita a que debía cont...

El modelo: ¿funciona o no? ¡Ojo con la narrativa!

  Fuente: Diario Gestión – El modelo no solo no funciona, sino que es injusto. ¡Cambiemos la Constitución!  – ¡Tonterías! Con este modelo millones de peruanos salieron de la pobreza, como nunca antes en nuestra historia. Hace dos años, cuando caminaba por la Av. Real en Huancayo, después de presentar mi libro “Resilientes, pero no indolentes” en la Feria del Libro de esa ciudad, llegué a una esquina en que una señora de la región estaba sentada en la acera vendiendo sus tubérculos. Encima de ella, leí una pinta en la pared que decía “¡Cambio de Constitución!” y al voltear hacia el jirón Piura leí otra pinta “¡Paro ya!”. Las imágenes me impactaron –les tomé fotos–, pues en el libro que acababa de presentar explicaba por qué un cambio del capítulo económico de la Constitución no beneficiaría a la mayoría de peruanos.  Desde entonces he participado en una serie de foros donde se ha tratado el tema. En varias de estas ocasiones me sentí asistiendo a un diálogo de sordos o...