Ir al contenido principal

El Gabinete Sinfónico de PPK

  1. En medio de la incertidumbre generada por la aparente tirantez de las futuras relaciones entre el Ejecutivo y el Legislativo, el nombramiento del primer gabinete de PPK constituye una fuente de esperanza y ha sido bien recibido por la mayor parte de analistas. Hay consenso respecto a que el gabinete es muy bueno. La mayoría de los designados son profesionales altamente calificados, con experiencia e independientes.


  2. En efecto, muchos de los futuros ministros no son miembros del partido de gobierno, ni estuvieron en el diseño del plan de gobierno de PPK. El gabinete me hace pensar en una nueva orquesta, para la cual el director (Kuczynski) ha convocado a un excelente concertino (Zavala) y a reconocidos ejecutantes. El director tiene mucho recorrido, ha interpretado  la partitura del concierto y en estos pocos días que faltan para la función tendrá que afinar la orquesta y modular ciertos pasajes o fragmentos, sobre todo algunos que han sido cuestionados por músicos amigos.


  3. Mientras tanto el público se prepara para ir al teatro. ¡Hay grandes expectativas para este concierto! Tal vez porque muchos piensan que el último director de orquesta fue calamitoso y que solo con tener uno nuevo –y, ojalá, excelente– la música fluirá mucho mejor. De hecho, las últimas encuestas señalan que el público está muy molesto con el maestro Humala y piensa que nos ofreció un concierto inaceptablemente desafinado (tanto, que sale con un porcentaje de aprobación menor que el de García o el de Toledo).


  4. El público peruano es muy variado, pero eso sí, parece ser muy exigente. En esta ocasión, los que tienen entradas para las galerías van preparados para abuchear, ya lo anunciaron; los que pueden pagar por asientos de platea han desempolvado sus trajes de gala y esperan el concierto de sus vidas. ¡Ojalá tengamos un extraordinario concierto! Pero aquí paro y me pregunto si esta analogía, a pesar de reflejar las creencias de muchos, es realmente adecuada.


  5. Las orquestas sinfónicas de calidad mundial tienen un buen director y excelentes músicos; además, ejecutan la música de grandes compositores. Es cierto que un cambio de director puede hacer una gran diferencia, pero también es innegable que una excelente orquesta tocando una composición muy compleja y distante del público no cosechará grandes aplausos. También es indudable que si durante el concierto la orquesta es saboteada por un grupo bullanguero, el público tampoco saldrá muy contento.


  6. En el nuevo gobierno, los ejecutantes del concierto no son únicamente los miembros del gabinete. Cada ministro deberá lograr que la mayoría de personas bajo su mando trabajen de manera diferente a la de antes; que pasen de ser empleados públicos a ser servidores públicos. Y ello solo se logra reformando la estructura de incentivos bajo la cual operan estos funcionarios. Sin modificación de incentivos –es decir, sin reforma del Estado– difícilmente tendremos un excelente concierto, aunque sea posible esperar menos notas disonantes.


  7. El gabinete anunciado es muy bueno, todos queremos que sea exitoso, pero para serlo tendrá que enfrentar grandes temas institucionales que todavía faltan afinar en la partitura de PPK, entre ellos la reforma del Estado y la reestructuración del poder judicial. Y, sin duda, para ser exitoso deberá tener una relación de trabajo productiva con el Congreso. Asegurar una relación constructiva con el Legislativo es tal vez el primer gran reto de este nuevo gabinete. 

Comentarios

  1. Guayito, estoy de acuerdo contigo, espero que la gente entienda que el país tiene que salir adelante y que todos tenemos que poner el hombro, no solo se debe criticar, sino comprender el por qué de cada cosa, roguemos a Dios porque todo salga bien, ya es hora de que nuestro país ocupe el lugar que le corresponde, ya se que no será de un día para otro, porque los cambios cuestan, pero si se hacen con sabiduría se logrará el cometido.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

¿Por qué perdemos tantos arbitrajes?

Fuente: Diario Gestión Los hechos demuestran que los funcionarios públicos ganan poco al tomar decisiones, pero pueden perder mucho cuando toman riesgos y deciden sobre un tema controversial. La consecuente inacción –explicada por “el pánico a firmar”– trae pocas consecuencias personales para los burócratas, pero termina siendo extremadamente perjudicial para la sociedad. El que no se tomen decisiones o que estas demoren una eternidad perjudica la provisión de bienes y servicios públicos y traba el funcionamiento del sector productivo.  En esta ocasión, nos concentraremos en la relación entre el pánico a firmar y los arbitrajes del sector público. También nos referiremos a las decisiones insensatas de algunos políticos y los consecuentes arbitrajes que ocasionan. En ambos casos, los peruanos perdemos mucho.  La renuencia a tomar decisiones y enfrentar enormes riesgos personales, ha llevado desde hace muchos años a que los funcionarios prefieran dejar que la decisión la tome un tribunal

La matriz energética, el mercado y las barreras

                                                                                          Fuente: Diario Gestión 1.    El Perú cuenta con una impresionante dotación de recursos energéticos: recursos fósiles, como petróleo y gas natural; un inmenso potencial hidroenergético, todavía no plenamente explotado; y también importantes recursos eólicos, geotérmicos y amplia radiación solar, las llamadas “energías renovables no convencionales” (ERNC). A pesar de que el desarrollo de las ERNC viene fomentándose alrededor del mundo para mitigar el cambio climático –tal vez, el mayor peligro que enfrentamos como especie–, en el Perú estas se encuentran en un nivel incipiente. Solo alrededor del 5% de la energía eléctrica que consumimos proviene de estas fuentes. 2.     Recientemente, el gobierno publicó el D.S. 003-2022-MINAM que propone incrementar la participación de las ERNC a por lo menos el 20% del total de la energía consumida en el país para el año 2030. ¿Será posible? Posible sí, fácil n

El Gobierno, los empresarios y el “volver a creer”

  Fuente: Diario Gestión El lema central de la CADE 2023 que tuvo lugar la semana pasada en Urubamba fue “Volver a creer, volver a crecer”. A la reunión empresarial asistieron muchos ministros de Estado; sin embargo, tras algunas de sus intervenciones, varios asistentes se preguntaron: ¿volver a creer? ¿En serio?... A continuación, algunas reflexiones en torno a qué hacer para que podamos pensar en volver a creer.  Desde hace muchos años, el presidente del Consejo de Ministros no es titular de una cartera ministerial; se dedica a tiempo completo a presidir el gabinete ministerial y a coordinar la política general del gobierno; a ser una especie de jefe de Gobierno. Alberto Otárola es, tal vez, el premier que se ha acercado más a esta figura. En la reciente CADE, Otárola contribuyó a fortalecer esta percepción. En buena hora: en el medio del estancamiento y desilusión, se necesitaba mostrar liderazgo en el Ejecutivo. Su acercamiento al sector privado es, sin duda, positivo y debe saluda