Ir al contenido principal

La regulación en energía: parches y más parches


  1. El mercado eléctrico es un mercado sumamente regulado. No podría ser de otra manera: la transmisión de electricidad y la distribución del servicio son monopolios naturales y como tales, deben ser regulados. En el caso de la generación, aun cuando en teoría es una actividad competitiva, en la práctica todo está regulado: quién y cuándo genera energía, cómo se forman los precios, cuánto y cómo se puede contratar, bajo qué condiciones, etc.
  2. En el mercado de gas natural la cosa es aún peor. No solo el transporte de gas y la distribución son monopolios naturales sino que en la producción del gas natural hoy existe prácticamente un monopolio (Camisea), lo cual obliga a que también deba ser regulada.
  3. Pero las autoridades, lejos de poner reglas de juego estables para que los agentes participantes puedan llegar a resultados similares a los de un mercado competitivo, han optado por intervenir continuamente y a veces de manera errática en el mercado energético nacional (electricidad y gas natural).
  4. En un mercado competitivo los agentes se guían por señales de precios y llegan a a un equilibrio que beneficia tanto a los consumidores como a los productores, a un resultado eficiente. En un mercado regulado de manera adecuada, los precios que se fijen deben reflejar la escasez del recurso (o servicio) en cuestión, pues es esta la señal que debe guiar las decisiones de inversión y consumo. Cuando la señal de precios funciona, se garantiza que no habrá episodios prolongados ni de falta de energía (exceso de demanda) ni de sobrecapacidad (exceso de oferta).
  5. En el caso del mercado energético peruano, sin embargo, el Estado ha intervenido sistemáticamente con “parches” en detrimento de la señal de precios. Muchos pueden ya no recordarlo, pero hace unos años se llegó a prohibir la construcción de nuevas centrales hidroeléctricas para privilegiar las plantas termoeléctricas y hacer viable el desarrollo de Camisea. Luego, cuando el Estado quiso incentivar la inversión en plantas de reserva, se establecieron las subastas de “reserva fría” con subvenciones que pagamos todos en nuestros recibos de energía eléctrica. Cuando el Estado quiso incentivar la construcción de nuevas plantas hidráulicas, se usó a Electroperú como intermediario para comprar la energía, pero a costa de generarle pérdidas cuantiosas a la empresa del Estado. Cuando se quiso incentivar las energías renovables, aparecieron las denominadas “subastas RER”, que otorgan subsidios a estos proyectos con cargo a las tarifas eléctricas que pagamos. Y menos mal que se detuvo la licitación de la central de Quillabamba, que solo era viable con un nuevo “parche” de ingresos garantizados.
  6. Pero tal vez el ejemplo más elocuente de la intervención estatal para forzar inversiones divorciadas de las señales de mercado lo constituye el Gasoducto Sur Peruano (GSP). Esta obra nunca se habría hecho sin mediar la intervención del Estado que le ha garantizado ingresos al GSP con cargo a – ¡qué sorpresa! – las tarifas eléctricas que todos pagamos.
  7. En el mercado energético peruano, hace tiempo que se perdió la señal de precios. El Estado ha generado una sobreoferta de electricidad por lo que los precios mayoristas tienden a la baja, pero paradójicamente las tarifas reguladas tienden al alza. El reto para el nuevo gobierno es ver cómo hace para recuperar una señal de precios que promueva un crecimiento sano del sistema sin seguir apelando a “parches” que solo distorsionan el mercado y afectan a los consumidores.

Comentarios

Entradas populares de este blog

"El nuevo gabinete y la economía"

  Fuente: Diario Gestión Hoy, el gabinete ministerial se presenta en el Congreso para pedir el voto de confianza. Es muy probable que lo obtenga. Seguramente, en las últimas semanas el gabinete Arana escuchó, recogió y filtró muchas propuestas de las agrupaciones políticas de cuyo voto depende su permanencia. Probablemente, algunas de las recientes decisiones gubernamentales –muy cuestionadas– son producto de este proceso de negociación. Y aunque nos gustaría escuchar hoy una propuesta coherente de Gobierno para los doce meses que restan antes de la segunda vuelta electoral del 2026, parecería que esto es poco probable. El actual gabinete es producto de la frustración y exasperación causadas por el poco avance en diversos frentes del gabinete Adrianzén, del cual muchos de los actuales ministros formaron parte. En contraposición con los avances que se venían registrando en materia de crecimiento económico y las expectativas que había generado la promoción de la inversión privada des...

"Petroperú: una verdad incómoda"

  Fuente: Diario Gestión Petroperú está a la deriva hace mucho tiempo. Lo sucedido el año pasado es un capítulo más en el costoso declive institucional de la empresa estatal. En febrero, el ministro de energía y minas (Oscar Vera, entonces funcionario con licencia de Petroperú muy cercano a su dirigencia sindical) y el presidente del directorio fueron removidos. En marzo, el gobierno nombró a un nuevo directorio. A los pocos meses, ante la crítica situación de la empresa, el directorio Stark planteó al gobierno cambiar la gobernanza y gestión de Petroperú con la participación y apoyo de una empresa reestructuradora de talla internacional, además de fortalecerla financieramente con nuevos aportes de capital. El directorio Stark se vio forzado a renunciar y, con una empresa descabezada, el gobierno publicó un D.U. para realizar nuevos aportes de capital y préstamos por un monto total cercano a los S/ 10,000 millones. A pesar de que la norma hacía referencia explícita a que debía cont...

Petroperú: el salvataje negado ya empezó

  Fuente: Diario Gestión A pesar de que los directivos de Petroperú y los ministros que nos representan en su Junta General de Accionistas (JGA) han repetidamente negado que se estaría solicitando o que el gobierno aprobaría un nuevo salvataje financiero de la empresa, la verdad es que este ya empezó. Lamentablemente, esta noticia no provino ni del MEF ni de la empresa en cuestión. Fue el Banco Central el encargado de darnos algo de luz sobre la real situación financiera de la empresa. En su “Resumen Informativo Semanal” del 17 de julio, señaló que el incremento del gasto de capital de junio se explicaría en parte por “el honramiento de la garantía del Gobierno Nacional de la línea de crédito de comercio exterior del Banco de la Nación a Petroperú (aproximadamente S/ 437 millones)”. El inicio de este nuevo salvataje no constituye sorpresa alguna. ¿Cómo podría una empresa con capital de trabajo negativo, sin acceso al financiamiento privado y que continúa arrojando pérdidas, no requ...